Cuando no hay millonarios recursos económicos, ni de Provincia, ni de Nación, que alimenten la campaña electoral de los grandes frentes políticos, no queda otra opción de apelar a la creatividad low cost, salir a la calle a hablar y escuchar a la gente (algo olvidado por los dirigentes, que solo apelan a la foto de campaña), y convencer al electorado que existe otra manera de hacer política, otro camino que no responder a la entrega de los recursos naturales a las corporaciones.
Esa es la propuesta que tiene el Partido Verde, comandado por Marcelo Romano y Mario Vadillo, acompañados por Emanuel Fugazzotto y Andrea Blandini, y un nutrido grupo de mujeres, jóvenes, emprendedores que buscan ser una acertada opción para no caer en manos del kirchnerismo de Anabel Fernández Sagasti, ni en el feudalismo provincial de Alfredo Cornejo.
Por eso, el Partido Verde apuesta a una tentadora oferta electoral que es el 2X1, a modo de liquidación de supermercado piden no votar a Anabel Fernández Sagasti, por su cercanía con Cristina Kirchner, y de «regalo» votás en contra de José Luis Ramón, acusado de «traidor» y «panqueque» por estar entregado al kirchnerismo. «Hacé valer tu voto» aseguran al unísono los precandidatos a senador y diputado nacional respectivamente, Romano y Vadillo, que buscan potenciar la lista «Verde».
Por otro lado, la precandidata a senadora provincial por el tercer distrito electoral por el mismo espacio, Andrea Blandini, apela a una ingeniosa manera de valorar la campaña electoral con actitud sustentable. En vez de llenar de tradicionales panfletos en la calle, la Blandini apela a la entregar semillas de lechuga y tomate para «sembrar esperanza» con la opción que propone el Partido Verde, de apelar a otra forma de hacer política.
La entrega de semillas para conformar una huerta familiar viene con una bolsita que acompaña con un código QR que dirige a un video en el que la Blandini explica su iniciativa.
El Partido Verde busca ser la tercera fuerza política de Mendoza, centrando su eje de campaña en defensa del agua, de la emblemática ley 7722 contra las megamineras contaminantes, por los derechos de los ciudadanos, por los derechos de los inquilinos, por el derecho a una vivienda digna, por el derecho a una alimentación saludable, por los derechos a los trabajadores de la salud y estatales, contra los tarifazos y la precarización laboral «Ni K, ni Anabel, ni Cornejo… basta de engañar a los mendocinos» sostienen.